¿Qué significa ser feliz en la era del social media?

Tener muchos amigos, hacer check in en los lugares de moda o el aeropuerto cuando estás a punto de irte de viaje, sacarle fotos a tu comida y tus compras, obtener mil likes con tu última selfie, son algunas de las cosas que hoy en día se hacen para recibir una pequeña dosis de dopamina (la hormona de la felicidad) pero ¿eso te hace realmente feliz?

En estos días es común escuchar o leer a personas cercanas, que afirman no estar plenamente satisfechos o felices con su vida, que sin importar lo mucho que se esfuercen por tener eso que pensaron les daría felicidad, no logran sentirse así. Nunca es suficiente. ¿Qué es lo que está pasando?

Sin duda existen muchos factores personales y sociales que determinan nuestro estado de ánimo, muchos de ellos son casi imposibles de cambiar, pero otros tantos son más sencillos de modificar o adaptar… no todo está perdido.

¿Qué está pasando?

Nos tocó vivir en la época donde la tecnología hace todo o casi todo por nosotros. Nos hemos acostumbrado a tener las cosas casi instantáneamente y a un clic de distancia, esto, a todas luces, no representa un problema como tal, pero todo se sale de control cuando pensamos que la vida funciona realmente de esa manera.

Aun no podemos controlar a las personas, el tiempo, la vida o la muerte con el poder de una app o un gadget, sinceramente ojalá que nunca se pueda, ¿te imaginas? ¡Qué aburrido! En fin, regresando al tema, no poder controlar la vida real (la vida fuera del plano digital pues) es motivo de inseguridad y frustración para muchas personas, por eso algunos prefieren desenvolverse en este mundo o realidad controlada, en la que sienten seguros ya que tienen el poder de decidir cómo quieren ver las cosas.

Un ejemplo de esto lo vemos en las redes sociales. A pesar de los esfuerzos de muchas personas por mostrarse felices, exitosos y realizados en dichas redes, la realidad es que no siempre es así. Estudios recientes de la Universidad de Charles Sturt en Reino Unido, han encontrado una relación entre pasar tiempo en exceso en Facebook y la sensación de soledad y/o depresión.

¿Por qué?

La mayoría de las personas que pasan demasiado tiempo conectados a las redes sociales, experimentan sensaciones de ansiedad, frustración, estrés, inconformidad, además de lo ya mencionado, pero ¿sabes exactamente por qué?

Pues en primer lugar imagínate, el hecho de comparar tu vida con la de otras personas, y sentir que les está yendo mejor que a ti, eso despierta tu envidia. También el hecho de pasar mucho tiempo stalkeando a tu crush en turno, porque “Ay está bien guap@” primero fomentas tu lujuria, para terminar, enojándote porque te diste cuenta que cómo tú hay muchos asechando. O ¿qué me dices de los videos de deliciosa comida que abundan en Internet que te hacen ir por un bocadillo, aunque ni siquiera tenías hambre? O qué tal aquellos que se la viven subiendo selfies para que les den muchos likes porque están convencidos de su gran atractivo físico, (aunque muchos hagan trampa). Pero lo peor de todo es desperdiciar valioso tiempo de tu vida scrollenando en Facebook o cualquier red social, sin hacer algo de mayor provecho para tu vida.

¿A ti te pasa?

Seguro te identificaste con alguno de los malos hábitos que acabo de mencionar, entonces no es para menos que te sientas frustrado, triste o enojado porque tu vida no va como la de los demás, porque no puedes hacer todas las cosas que ves en las redes, es por eso que muchas personas viven en ansiedad porque no les responden un mensaje, porque no tienen likes, o estresados y ávidos de aceptación social, que es la sensación que nos da tener muchos amigos en estas plataformas.

La generación que se está viendo más afectada por el estrés que estos hábitos ocasionan, son los millennials, personas que en estos momentos tienen entre 18 y 38 años aproximadamente. Según un informe de la American Psychological Association APA, encontró que esta generación era más propensa ya que se sentían desconectados de su familia debido a la tecnología, incluso cuando estaban físicamente juntos. Ellos reportaron también el mayor nivel de estrés relacionado con la tecnología en general.

Si lo reflexionamos un poco, tiene mucho sentido ya que según Nielsen, los millennials pasan un promedio de 18 horas en línea por semana con sus smartphones, comparadas con las 15 horas de las otras generaciones.

Estamos olvidando como hacer relaciones personales, sólidas y trascendentes con las personas cara a cara. Darle like a los estados o fotos de tus amigos de vez en cuando, no es cuidar y fomentar una amistad. Si tuvieras un problema grave ¿a cuántos de todos los amigos que tienes en Facebook podrías llamar para que te ayudara? Y de esos a los que llamaste ¿cuántos te ayudarían de verdad?

La realidad que vivimos a través de las redes, por más loco o absurdo que suene, la vemos a través de esa interfaz y la configuramos de tal forma que sólo vemos lo que queremos y como lo queremos ver, lo demás lo bloqueamos, lo eliminamos, o lo silenciamos y sin darnos cuenta nos estamos aislando. Pero no temas, siempre hay una solución.

¿Qué puedes hacer?

Trata de disminuir gradualmente el uso de tus redes. Comprende que en ese mundo, y bueno, en general, no todo lo que brilla es oro, deja de comparar tu vida con la de los demás, recuerda que no todo es tan perfecto como se muestra ahí. Pasa tiempo de calidad con tu familia y amigos, nada de celular o dispositivos con Internet. Recuerda que fuera del mundo digital, las cosas son diferentes y no se pueden controlar con un clic, tampoco las cosas son tan instantáneas como nos gustaría. Deshacerte de esos sentimientos negativos que te aquejan día a día, no es tan difícil como piensas.


Fuentes:
http://www.sciencedirect.com
http://www.emarketer.com
http://www.abc.es